Todo lo que necesitas saber sobre la Rinoplastia Ultrasónica

La rinoplastia ultrasónica es una novedosa y revolucionaria técnica de cirugía estética destinada a la remodelación y corrección nasal. Este novedoso método se caracteriza por emplear un dispositivo ultrasónico que permite realizar intervenciones con traumatismos muy leves, sin inflamaciones voluminosas ni hematomas. La rinoplastia ultrasónica es muy similar a la convencional, la diferencia radica en que en ésta se utiliza un bisturí piezoeléctrico para llevar a cabo determinados pasos de la rinoplastia, a través de un aparato denominado como piezotomo. Ese aparato a través de sus vibraciones permite trabajar con el hueso con mucha precisión, evitando posibles fracturas no deseadas. Es una técnica quirúrgica basada en la energía ultrasónica, haciéndola muy segura para distinguir tejidos blandos de materiales duros.

Se trata de una técnica muy novedosa en el mundo de la cirugía estética, pero que ha sido empleada durante muchos años en el mundo médico, como la neuronocirugía, cirugía maxilofacial o traumatología.

La rinoplastia ultrasónica está siendo cada día más empleada debido a que es menos traumática que la convencional y se caracteriza por la naturalidad de sus resultados. Esta intervención nasal se lleva a cabo en nuestro área quirúrgica de Clínica Cíplex bajo anestesia general, y tiene una duración aproximada de 1 a 2 horas, según la técnica o corrección que se realice. En casos seleccionados en los que solo hay que mejorar la punta nasal se interviene con anestesia local y sedación. Te interesará saber que no precisa de ingreso hospitalario, el paciente será dado de alta de nuestra clínica entre las 2 y 4 horas después de la intervención.

Rinoplastia ultrasónica para problemas respiratorios

¿Sabías que no todas las personas se someten a esta intervención con fines estéticos? Exacto, no todas las personas se someten por el mismo motivo, con la rinoplastia ultrasónica se puede conseguir mejoras funcionales, tanto anomalías de la estructura externa como interna. Cuando lo que se pretende con la operación es mejorar además la función respiratoria o la desviación del dorso relacionada con el tabique nasal, hablamos de rinoseptoplastia. Respirar de forma incorrecta es un grave problema y con la rinoplastia funcional este aspecto se puede solucionar, puedes querer una nariz bonita pero sobre todo lo importante es que sea funcional.

La intervención más realizada en este sentido es la corrección del tabique nasal desviado o deformado. Cuando el tabique está desviado una de las fosas nasales pueden obstruir esa parte de la nariz  y, por consecuente, debilitar el flujo de aire que aspiramos y expulsamos. Puede provocar sangrados, dolor, respiración ruidosa, dificultad en el sueño… En los laterales internos de la cavidad nasal, los cornetes se ven muy afectados, dificultando la respiración. También se emplea para mejorar patologías tales como la rinitis, migrañas, asma o faringitis.

Es muy común que hayas estado respirando con dificultades  y no te hayas percatado por considerarlo “normal”. Muchos pacientes no son conscientes de la mala respiración que estaban padeciendo con anterioridad, hasta que se someten a esta intervención funcional y estética.

Diferencias entre rinoplastia ultrasónica abierta y cerrada

Ambos tienen excelentes resultados y son muy efectivos para resolver cualquier tipo de problema. La diferencia principal radica en la manera de acceder a la parte interna de la nariz.

– Rinoplastia ultrasónica abierta: mediante una pequeña incisión en la base de la nariz que separa las fosas nasales se levanta la piel, accediendo así al hueso y al cartílago para una mejor visión. Proporciona una mayor visión para el cirujano, que puede divisar mejor los tejidos y realizar la intervención de manera más precisa. Permite la rectificación de desviaciones, reducciones o asimetrías.  La cicatriz, a lo largo de los meses se hace a penas invisible al ojo humano.

– Rinoplastia ultrasónica cerrada: en esta ocasión la intervención se realiza mediante unos pequeños cortes en el interior de las fosas nasales, moldeando la estructura ósea nasal y el cartílago. Aquí el cirujano no tiene una visión directa a la zona en la que se realiza la intervención. Al realizarse dentro de los orificios nasales, no hay cicatriz externa. Se trata de una intervención no apta para todos los pacientes, se suele realizar para casos en los que haya que rebajar algo el caballete o estrechamientos de nariz.

4 ventajas de la rinoplastia ultrasónica frente a la convencional

Esta intervención ha ido incrementándose a lo largo de los últimos años debido a sus buenos resultados y variadas ventajas. La principal ventaja es la forma en la que se realiza la rinoplástia con el bisturí piezoeléctrico. No es necesario realizar fracturas como en la rinoplastia convencional, en la ultrasónica, gracias a la técnica a través de vibraciones se trabaja con el hueso mediante vibraciones, con mucha precisión. Es menos invasiva.

• Resultados muy naturales en los que la cicatriz a penas es perceptible al ojo. Al ser menos invasiva la inflamación, traumatismos y hematomas son muy leves.
• El tiempo de recuperación es más reducido. El paciente puede regresar a su vida normal en un periodo de tiempo mucho más reducido
• Oportunidad de tener 2 cirugías en una: funcional y estética.
• Mayor precisión, evitando fracturas indeseadas en los huesos más frágiles.

Recuperación de la intervención:

Como te comentábamos antes, es mucho más breve que en una rinoplastia convencional. Al no precisar de ingreso hospitalario, el paciente es dado de alta entre las 2-4 horas después de la intervención, pudiendo volver a casa en el mismo día en cuanto se le haya pasado el efecto de la anestesia. En a penas una semana puedes ir haciendo vida normal poco a poco, recuperándola del todo en un margen de 5-8 semanas.

Durante la primera semana de la intervención, el paciente deberá llevar taponamientos nasales, que s retirarán pasadas 48-72 horas, y a un férula, que se le retirará a los 7 días junto a los puntos. Tendrá medicación para evitar infecciones y controlar el dolor que puede ocasionarse en los primeros días y la inflamación.  En este tiempo el paciente debe mantener reposo y no hacer esfuerzos ni agachar la cabeza.

Pasados los 10 días desde la rinoplastia ultrasónica, el paciente podrá ir haciendo vida normal, sin hacer actividades físicas todavía hasta que hayan pasado unas 8 semanas, que ya podrá recuperar su total vida habitual. Al cabo de los 6-8 meses la posible cicatriz ocasionada será imperceptible.